martes, 22 de junio de 2010

Punto Suspensivo

Te conocí, bailamos, nos gustamos, nos besamos. Pensando que esa noche quedaría en el olvido, nos ayudaron a reencontrarnos. Me interesaste y decidí jugármela. Me entregué de lleno a conquistarte, y de a poco fui viendo pequeños destellos de lo que sería un nuevo amor. Siendo el hombre más feliz del planeta (pensando como un soñador), no podía sino imaginar una vida contigo. Cometí un error estúpido. Lloré las siguientes semanas extrañándote y arrepintiéndome.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Se le agradece de antemano.
Cualquier crítica negativa será castigada con la muerte.
Es libre de opinar.