domingo, 28 de diciembre de 2008

En mi mente...

Es una noche húmeda, comenzó a llover ayer en la tarde, ya es de madrugada. No sé qué hora es, no traigo reloj, pero tengo una noción, pues escuché 12 campanadas, de algún lugar, no estoy seguro, pero lo hice...

...Corro calmadamente por el medio e la calle, no siento culpa alguna, no sé por qué, pero no me arrepiento de mis actos, lo hecho, hecho está; fue perfecto, mi disfraz de repartidor, el paquete, completamente inofensivo, soy un genio. Lástima, tener que utilizar mi inteligencia en esto...

...Trabajar con explosivos es peligroso, un mínimo error y el cuarto queda tapado de mí, así no tienen que enterrarme o cremarme, alcanzo para toda la familia. No quise dinamita, o pólvora, usé algo mas complejo, y letal; cuando la nitroglicerina se mezcla con cierto ácido, es sólo cuestión de tiempo...

...Aún así, eran linda pareja, lástima, una gran pérdida, pero un pequeño precio, extrañaré a mi mujer, la amaba, y a mi querido hermano...

...Recuerdo el día de mi matrimonio, en esos momentos era el día más feliz de mi vida, eso pensaba, hasta que mi mejor amigo me dijo algo espantoso sobre mi futura esposa y mi propia sangre. No quise creerle, lo insulté, lo corrí de la fiesta, le dije traidor, no lo volví a ver.
Tiempo después supe la verdad, lo peor es que lo vi. con mis propios ojos, ella y él, yo y ellos, me sentí pésimo...

...Es irónico pensar que, cuando éramos jóvenes, me agarré a la primera novia de mi hermano, bueno, ella me agarró; me drogó y me hizo el amor. Al día siguiente desperté y lo vi parado frente a la cama, furioso, pregunte qué ocurría, apretó el puño, golpeó fuertemente la pared y se fue. Giré mi cabeza, la vi durmiendo a mi lado, desnuda, yo no recordaba nada. Me vestí, fui tras mi hermano, ella quedó dormida, sobre una mancha roja, sola, le tenía rabia, casi pierdo un hermano por su culpa. Jamás despertó...

...Sentado frente a unos barrotes, solo, pensando, sin remordimiento ni culpa, aunque hayan encontrado la evidencia en mi casa, o pudieran identificar al dueño de las huellas en aquel cuchullo de cocina. Además, sólo me quedan diez años, y mi condena acaba en quince...

...Cuando me atraparon, me notificaron positivo.

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